Somos como hormigas, vivimos rodeadas de 6.000 millones más como nosotros en un hormiguero gigante, somos el punto sobre la i, somos un mísero trozo de roca en una galaxia que a saber cuántos mas trozos de roca como el nuestro tendrá con seres iguales o semejantes a nosotros, al fin y al cabo somos quienes somos aunque muchas veces lo olvidemos.
Pasa el tiempo y olvidamos nuestros orígenes, a la gente con quien nos criamos, olvidamos en muchos casos con el paso del tiempo la razón de por qué hacemos algo en algún momento de nuestras vidas. El tiempo y los malos momentos van de la mano, cuando el tiempo pase podremos decir que los malos momentos han desaparecido, todo lo que somos se reduce a simple casualidad, no sabemos que será de nosotros y de cómo nos irán las cosas. Todo lo que nos sucede no está escrito en alguna especie de libro en el que sale la historia de nuestra vida de principio a fin, todo se reduce a simple casualidad, las cosas suceden porque tienen que suceder no porque nosotros queramos que sucedan de una cierta forma.
Siempre nos olvidamos de esa persona/personas que conocemos en algún momento determinado de nuestras vidas, el cual no sabíamos que iba a suceder, puede ser que ese momento cambie nuestra vida por un instante, nos hace cambiar la percepción de las cosas que a lo mejor era errónea hasta ese momento, pero que luego dio un giro de 180º, con eso y mucho mas seguiremos siendo quienes somos aunque haya personas o sea la misma persona quien se olvide de quien es, qué hace aquí, por qué lo hace, cuando se irá, son muchas preguntas con miles de respuestas, a las cuales somos cada uno de nosotros los que las debemos de ir respondiendo a medida de que pase el tiempo y nos vayamos olvidando de quiénes somos y queramos recordarlo.
A medida que pasa el tiempo y transcurre nuestra vida nos van viniendo mas y mas preguntas a la cabeza de que es lo que estamos haciendo con ella, son esas preguntas y los pequeños sucesos/momentos los que hacen que cada vez que nos olvidemos de quienes somos, se nos encienda la “bombillita” y sepamos de nuevo qué somos, quienes somos, por qué somos así y muchas más preguntas que a lo largo de nuestras vidas responderemos…
DaNiEl AlEjAnDrO
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